Desde Itacolomi / 04 CATAFORTE

Aún recuerdo como, al anochecer, corría por las calles de Aspe rumbo a mi casa. Me habían dicho que después de las seis, era invierno, el hombre del saco salía a la calle y se llevaba a los niños que encontraba. El hombre del saco, el que recogía trapos y basuras por las calles se convirtió así, en mi imaginario, en nuestro imaginario, como un ser peligroso.

Aún hoy día, las traperas y traperos, las basureras y basureros, son una clase social en la que solo pensamos como un sector desfavorecido al que hay que dar protección social. Quincallero, quinqui, recuerda a El Lute, el atracador, y hay diccionarios que nos hablan de los quinquis como grupo social que frecuentemente recurre a la delincuencia.

Pero hay lugares en nuestro planeta donde las cosas comienzan a ser construidas y vistas de otra manera. Las recolectoras y recolectores de basura, de necesitar auxilio social, pasan a reivindicar su espacio, a cumplir un servicio social para quienes queremos vivir en una sociedad sustentable, para quienes creemos en la necesidad del decrecimiento.

Es con esa idea que surgió, ya hace cerca de diez años, el Movimento Nacional dos Catadores de Materiais Recicláveis (MNCR). Se trata de un movimiento social que  organiza y lucha por el reconocimiento social de las catadoras y catadores de materiales reciclables de Brasil.  El MNCR cree en la práctica de la acción directa popular, que es la participación efectiva de las trabajadoras y los trabajadores en todo lo que envuelve sus vidas. Con su apoyo y orientación, en cooperativas y asociaciones, o grupos, luchan por la autogestión de su trabajo y el control de la cadena productiva del reciclaje y garantizan que el servicio que realizan no sea utilizado en beneficio de unos pocos, sino que sirva a todas y todos.

Ayer miércoles 22/06 en nuestro Gravataí, una ciudad que ya es considerada, ciudad “Amiga del Catador”, asistimos a la entrega de la Graduación de Catadores del Proyecto CATAFORTE y al Encontro Estadual de Formação de Catadores. En un apasionada charla, escuchamos como Alexandro Cardoso, representante nacional del  MNCR, afirmaba: “nuestro trabajo no acaba con la mejora del proceso de recogida selectiva, la lucha ha de continuar hasta que podamos ser productores de nuevos productos a partir del material reciclado”

En Gravataí, la Coleta Seletiva Solidária representa además la reducción de los gastos públicos y la cualificación de la limpieza urbana y como manifestó la Prefeita Rita Sanco, trae beneficios para la población: “Nuestro principal objetivo cuando decidimos apoyar las actividades en el municipio, además de preservar el medio ambiente, era generar riqueza para toda la población. No podemos pensar en desarrollo económico cuando no hay distribución de riqueza.”

El Proyecto CATAFORTE se está desarrollando con el objetivo de contribuir a la cualificación de los catadores en la cadena productiva de los materiales reciclables. En Rio Grande do Sul ha contado con la participación de mil catadores de 33 asociaciones y cooperativas de varias ciudades del estado y ha sido impulsado por el MNCR con el apoyo de la Fundação Banco do Brasil (FBB) y de la Secretaria Nacional de Economia Solidária (Senaes)/Ministério do Emprego e Trabalho.

Viendo el entusiasmo de aquellas mujeres y hombres que estaban ayer en el Parque de Eventos, se reforzó la necesidad de practicar la basura selectiva allá donde estemos. Aquella mujer y aquel hombre del saco están construyendo, muchas veces más que nosotras y nosotros, ese otro mundo posible.

Mas información http://www.mncr.org.br/

Más fotos: https://picasaweb.google.com/albertyleslie02/1106CATAFORTE#slideshow/5621135648686680114

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